Papá – pregunta el hijo adolescente – ¿Por qué un futbolista gana más dinero que un médico o un bombero? No parece justo. La vida es injusta… los médicos y los maestros deberían ganar más, ¿no crees?
El Papá le responde: ‘¿Realmente te parece injusto?’.
El hijo asiente con firmeza: ‘Sí, completamente. Es injusto que profesionales como médicos, maestros, bomberos o policías reciban salarios tan modestos teniendo en cuenta la importancia de su labor’.
El Papá, con calma, le dice: ‘Déjame explicarte. Primero, es importante entender que los futbolistas no reciben su salario del Gobierno. Y segundo, antes de juzgar si los salarios son justos o injustos, es fundamental comprender cómo se genera el dinero. Una vez entiendas esto, comprenderás todo el panorama’.
El hijo interrumpe: ‘Pero Papá, un médico salva vidas, ¡es mucho más crucial que un futbolista!’.
El Padre le explica: ‘Has caído en la trampa de comparar. Creer que por la importancia de la labor del médico debería recibir un salario superior es un error de enfoque. El mercado no funciona de esa manera’.
‘Necesito que entiendas: reconozco la noble labor de médicos, bomberos, maestros, y su impacto vital en la sociedad. Nadie cuestiona su relevancia. Sin embargo, el dinero no se mueve según lo que consideramos crucial, sino según la ley de la oferta y la demanda’.
El Padre continúa: ‘Los futbolistas ganan cifras astronómicas porque generan enormes cantidades de dinero. A través de millones de seguidores que pagan pequeñas cantidades, se generan grandes ingresos. ¿Qué satisfacen los futbolistas? Una necesidad de entretenimiento. Si una persona ve un partido, está consumiendo publicidad, la cual se traduce en ingresos. Esa acumulación de pequeñas sumas resulta en grandes ganancias para los futbolistas’.
Y así, prosigue el Padre: ‘Te planteo una pregunta: ¿Estarías dispuesto a pagar cien mil dólares por un partido de fútbol? Probablemente no. ¿Y 30 dólares? Seguramente sí. Ahora la pregunta clave: ¿Estarías dispuesto a pagar cien mil dólares para que el mejor médico salve la vida de un ser querido en una operación de riesgo? La respuesta es evidente. El médico ofrece un servicio crucial a una familia, mientras que el futbolista entretiene a una audiencia masiva con algo trivial’.
Finalmente, el Padre concluye: ‘La clave está en el impacto. Quien impacta a millones, recibe millones. ¿Cómo puedes impactar? Hay infinitas maneras de lograrlo. El futbolista entretiene y divierte; las personas lo siguen en televisión, acuden a estadios, compran su merchandising (Productos que recomienda de una marca o empresa). La importancia radica en entender que la relevancia y el impacto son los pilares que determinan el valor económico en nuestra sociedad’.